CASA OKUPA convertida en vivienda.
Nos encontramos con una villa entre medianeras en un estado de abandono y deterioro importante, situada en Ategorrieta, en la falda de Ulia.
Una vivienda con muchos metros pero repartida en 5 plantas. El reto era distribuirla de tal forma que hubiese conexiones visuales entre plantas e intentar romper con esa verticalidad. Diseñamos una escalera que hiciese de nexo entre distintas plantas, una escalera liviana, muy ligera y lo más “transparente” posible para que la luz, sonidos e imágenes traspasaran planta tras planta sin ninguna dificultad y así la convertimos en la columna vertebral de la casa.
No conforme con ello, decidimos que la zona de día, compuesta por las dos primeras plantas tenían que interactuar entre ellas y que hubiera una comunicación visual más potente; de ahí que proyectáramos una doble altura y así convertir las dos primeras plantas en una sola, con ello conseguimos que el espacio público quedara totalmente abierto en vertical.
Diseñamos tres habitaciones individuales idénticas para tres chicos, separadas entre ellas con puertas correderas, que al tenerlas recogidas crean un recorrido distinto y da pie a la interacción y que una vez cerradas se consigue intimidad y recogimiento.
Decidimos dejar vista la estructura de madera de la casa , así como los muros de carga de piedra y ladrillo, realzar su esqueleto y banalizar en ornamentos. Es una vivienda que sorprende una vez estés dentro ya que por fuera parece muy hermética pero por dentro se abre hacia arriba, hacia la terraza y hacia el patio, un patio con mucha vegetación que transmite paz y serenidad.