Antes, las cocinas se ubicaban en las zonas más oscuras de las viviendas, casi siempre dirigidas a patios interiores, y por consiguiente lejanas a las zonas de estar y a espacios de luz natural.

Nosotros cambiamos radicalmente esa idea y ubicamos las cocinas al lado de comedores y salas de estar; cerca de ventanas que dan a las calles principales, como es en este caso a Peña Y Goñi, en el barrio de Gros de Donostia, donde la entrada de luz natural es mayor.

Con esta idea, convertimos las cocinas abiertas en zonas centrales de la vivienda y en nexo de unión de todas las estancias. Así la familia está más unida y el que cocina, comparte momentos con el resto, en lugar de quedarse aislado, más si se tienen niños; ya que si están en el salón, será como estar en la misma estancia que ellos, y además se les tienen vigilados. En esta vivienda hemos forrado el pilar principal con chapa de acero corten.